Mas que cuatro letras

En el recetario amoroso que me proporciono mi madre durante mi infancia y adolescencia decía y de su propia experiencia quiero suponer, que nunca experimentara una relación basada principalmente en el sexo o que empezara con dicho acto… jamás lo pensé, hasta hace unos cuantos meses estado en aquella habitación de vidrios empañados en donde no solo hacia calor, si no que también se vivía el calor en cada centímetro del cuerpo, el hizo que mi mundo cambiara de lugar y ya no era ni circular, ni plano, ni vació, ni siquiera remotamente conocido, cambio el significado de mis noches y me volvió tan suya en todos los sentidos que no hacia mas que esperar la hora de verlo… quería tenerlo en mi casa todo el tiempo, quería tenerlo en mi cuerpo todo el tiempo.
Poco a poco y casi imperceptiblemente fue haciendo que su mirada, su voz, sus palabras y su tacto fueran enteramente un reflejo de lo primero que vivimos juntos, el sexo… aquel sexo mágico que ahora va llenando mi vida de magia y tranquilidad, de energía que va mas aya de los cuerpos, de ese latido de corazones acelerados y miradas suplicantes… estamos juntos dentro y fuera de la cama e incluso si el o yo estamos en distintas ciudades… estamos mas juntos que nunca gracias a lo primordial, gracias a la semilla que plantamos aquel día sin imaginar que llegaríamos a tener otra unión que no fuera la que se daba debajo de las sabanas…
No me atrevo a asegurar nada, pero si creo que mi madre, si escuchara esto, no lo comprendería… no lo comprenderá… aunque me vea feliz.

La Palabra con A

No pude, no es suficiente el llanto, ni todas las palabras que ha inventado el hombre para pedir perdón, quiero gritarte que te extraño, te extraño dentro de mi, quería conocerte, quería besarte, que fueras algo mas que el motivo de mi vida, quería verme en tus ojos, escucharte reír y llorar y no pude, no pude soportar saber que si venias no vivirías como yo hubiera querido, puedo estar un día sin comer, pero me quedaría sin vida si no estuviera a mi alcance darte algo a ti, mi mente parece estallar y mi alma se hace polvo al pensar que no te tendré nunca, no a ti… No soy tan fuerte, soy aun muy pequeña!!! Cuanto valor hace falta para ser madre, cuanto las admiro al verlas en la calle, cuanto las admiro al verlas en la escuela, hay en sus vidas la mayor alegría por haber dado vida… cosa que yo no pude hacer.

Lloré mucho tiempo por tu ausencia, pienso todavía en ti, caminar, hablar, el kínder, me perdí de ti y tu te perdiste de tanto, de respirar, de conocer todos los sentimientos, el amor, la alegría, hace mucho que no me sentía feliz, fui muy egoísta, te privé de todo esto, te privé del mar y por eso ya no quiero entrarme en el, no quiero sentirlo, no quiero ni siquiera verlo, el mundo me da cosas que merecías mas tu que yo, pero pensé que merecías aun mas, aun mas que la vida que yo podía darte, nunca me lo perdonare, jamás volví a ver a tu padre, es mas el no sabe que fuiste nuestro alguna ves, que estuviste en mi en aquellos días de otoño fríos y lluviosos, el, me enteré esta feliz lejos de nosotros, lejos de saber, lejos… tal vez eso es lo único bueno de mi decisión, no se como habría sido si hubiera tomado otro camino, no se si el hubiera abandonado lo que ya tenia por nosotros, pero hoy, es feliz. Y tu… tu merecías mas, mucho mas… ahora tienes el cielo, la eternidad y la luz.